jueves, 16 de septiembre de 2010

REFLEXIONES SOBRE UN MUNDO DESBOCADO


Así como lo explica Anthony Giddens, el término globalización es relativamente nuevo, pero solamente el término, puesto que el proceso se ha dado a lo largo de las décadas anteriores. La globalización toma en cuenta todos los ámbitos de nuestra vida aunque, como se dice, muchos piensan que solo la economía se ve involucrada en el proceso.

Para que se pueda decir que estamos “globalizados”, tenemos que estar en cuestiones similares a los de otros países, un ejemplo de esto es, cuando vamos al supermercado y casi todos los productos que encontramos son de empresas transnacionales. Esto da pie a que los países comiencen a consumir los mismo en todo el mundo, pero esto no significa que seamos iguales económicamente hablando.

El país que más ha tenido que ver en esta evolución, me parece que son los Estados Unidos, porque al ser éste una súper potencia, es el que da las pautas que han de seguir los otros países. Más específicamente en México, podemos analizar todos los aspectos de la globalización.

*En cuanto a economía, se refleja en los mercados y en los resultados de la bolsa. La moneda por excelencia es el dólar, todo el dinero se contabiliza en dólares y, en cuanto los mercados bursátiles americanos caen, no tarda en desplomarse la economía en nuestro país.

*En el caso de la familia, cada vez son menos utilizadas las estructuras de la familia tradicional. Son mayoría las familias donde sólo es la madre o donde es la abuela la que cuida de los hijos, pero me parece que esto no es tanto una cuestión de decisiones, sino más bien de tradiciones a lo que, también, hace frente la globalización.

*Las tradiciones frente a la globalización es que, al tener los mismos estándares que otros países, las propias tradiciones se han ido perdiendo, ahora nos queremos comportar más americanizadamente, y menos como nuestras costumbres nos lo decían.

En un ámbito que me interesa mucho –que es el cultural-, la globalización también ha hecho su papel. Me parece que comenzaron a cambiar los esquemas en los años sesenta, precisamente en Estados Unidos, con el arte pop, cuando Andy Warhol comienza a reproducir imágenes en serie, salidas del consumismo.

Un claro ejemplo de esto, es tomar como obras de arte  las imágenes de Coca-Cola, Pepsi, Campbell’s, e imágenes de artistas famosos y, por lo tanto, mundialmente reconocidos como Marylin Monroe, Elvis Presley o Jackie Kennedy. 

Todo esto nos remite a una cultura de masas, donde lo que importa son los bombardeos que nos dan los medios de comunicación, algo que se va reflejando poco a poco en nuestra cultura y en la cultura de todo el mundo. De esta manera, sí se puede decir que los medios de comunicación son el cuarto poder, porque representan una gran influencia sobre la población.

De esta manera, nosotros como comunicólogos tenemos un gran poder en las manos e, independientemente del uso que le demos, va a repercutir en las ideas y nuevas costumbres que se vayan creando entre el público; puede ser que a últimas instancias la globalización haga lo suyo y llegue a todo el mundo.